La vida es como una caja de bombones, nunca sabes que va a pasar despues de un reinicio.

Cuando migramos de NT Server a 2003, una de las "bondades" de este SO que podias leer entre sus destacadas características, era que los reinicios despues de las actualizaciones de habian reducido a la mitad.

!Mentira cochina!.

Como muchos sabeis, Microsoft lanza actualizaciones de sus productos los segundos martes de cada mes, pues bien, no hay martes segundo de mes que no haya que reiniciar los servidores, con la moléstia que esto supone para el sufrido administrador, ya que debe de buscar un hueco fuera de horario laboral para dicha tarea no exenta de peligros.

Al reiniciar el servidor y ver los mensajes de "cerrando conexiones", "apagando máquina", etc.. te invade una extraña sensación, es como si no fueras a volver a ver más el escritorio del servidor, tan bonito qeu lo tienes lleno de iconos y colorines... ; una lágrima de despedida se desprende por tu mejilla porque puede que sea la última vez que lo veas; y, mientras va arrancando, cruzas los dedos y mueves los pies nerviosamente con la esperanza de que puedas logearte sin problemas y volver a ver tu maravilloso escritorio.

Y es que reiniciar un servidor es toda una aventura, suele ocurrir que, debido a alguna actualización, no consigas entrar en el sistema y te las veas canutas para resolver el problema o intentar deshacer dicha actualización. Siempre he dicho, medio en broma medio en serio, que Microsoft, deberia indemnizar por publicar una actualización defectuosa. Una incorrecta actualización puede que mande tu servidor a tomar por culo, y las horas y dolores de cabeza que ello puede acarrearte a la hora de resolver el problema, debería ser suficiente motivo para que se te compense. Has pagado por una licencia (y muy cara) con derecho a actualizaciones, si estas hacen que tu máquina no funcione correctamente, algún tipo de compensación deberias tener.

Pero nada, ahí estás tu, con tu máquina que no quiere entrar en el sistema, los usuarios preguntándote que pasa que no pueden trabajar y tu cagándote en la puta informática y preguntándote porque no hiciste jardineria o algo así. Cuando, finalmente, resuelves el problema, te juras a ti mismo que nunca más actualizaras el sistema, "prefiero que me ataque un usuario 'malintencionado', si tiene huevos, que volver a pasar por esto", te dices, pero vuelves a hacerlo, tu dedo cobra vida propia y el ratón se dirige hacia el cartelito de "hay actualizaciones disponibles", ¿le doy o qué?, venga, con dos cojones. Y esos mismos dos cojones són los que despues se te caen.

Hay una practica lógica que todo administrador de red deberia seguir, y es no actualizar los sistemas nada más publicarse las actualizaciones; puesto que si se detectan errores estos serán reportados a Microsoft y, supuestamente corregirá o retirará la actualización.

Así que, CUIDADO, hoy es el segundo martes del mes, vigila tu espalda, despídete de los tuyos, abraza a tus compañeros (bueno, eso no, que les den..) armate de valor, en breve verás el aviso, no te pongas nervioso, dale al clic, actualiza, reinicia, y... ¿será esta vez?.